Las 7 vidas de los gatos

El otro dia hablaba con Petra, la doberman de la esquina, me contaba que Felix, el gato del panadero, se había caído del balcón del departamento intentando atrapar una paloma. Yo me reía sin parar porque lo primero que nos dicen a los gatitos es: ustedes y sus siete vidas! Ponele que fuera así, qué tenemos siete vidas, ¿se piensan que las “gastaríamos” atrapando una paloma? ni que fueramos perros! 

La historia de las siete vidas viene obviamente de los orientales, solo ellos pueden concebir la vida como nosotres. Ellos son conscientes de la energía que manejan los seres humanos, los animales, todo aquel ser vivo que habita el planeta, solo que los gatos la percibimos de una manera particular, sensorialmente para que me entiendan. 

Los gatos orientales tienen un sensei llamado Lu han, un gato gordo precioso y extremadamente sabio, él creó el mantra gatuno más conocido como “raúl”. "Raúl! es un momento de introspección, un momento de conexión con la tierra, según él los gatos podemos ver siete universos posibles para cada situación que enfrentamos. Podemos sentir la tierra moverse, el viento purificar el aire, el agua que fluye por la tierra, oímos por las 280 terminaciones nerviosas de nuestras orejas hasta el mínimo volar de una mosca, podemos comunicarnos, no solo con nuestra especie sino con todas aquellas que tienen conciencia natural. Somos conscientes de la muerte, del paso del estado vivo al eterno. Y obviamente estamos comunicados con el universo y sus astros por lo cual nuestras vidas son en cierta forma, nuestros dones, nuestras virtudes. 

Más aún los años transforman los recuerdos y las necesidades transforman las acciones. Los saberes de Lu Han hoy en día no son más que chistes para les, las y los karen. Lu Han, esté en el universo que esté, debe estar echando chispas... 

Vivir en constante aceptación de nuestra existencia es ser conscientes de la responsabilidad que conlleva cuidar el planeta y del bien o el daño que le hacemos con nuestras acciones; por lo cual… se lo imaginan a Lu Han perdiendo una vida por cazar una paloma? Gatas madres que se me eriza el pelo. No señores, ningún gato entregaría una de sus vidas por algo así, pero bueno, supongo que puede pasar ¿no? Al final seguimos siendo gatos y vivimos minuto a minuto. El otro día tratando de cazar una mosca que se me  escapó por la ventana casi sigo de largo, por suerte clave las garras y no me fui de narices a la calle.

Pero qué se yo, imagino a los humanos transitando sus vidas sabiendo que solo tienen una vida y puf me hago una idea del vértigo que les provoca. No debe ser fácil saber que solo tenés un tiempo predeterminado para venir, estar ,dejar tu mensaje y seguir. Pero parte de la gracia y el mensaje gato que les puedo legar es que vivir con miedo al qué pasará no es muy sano, por eso lo del vivir minuto a minuto, nosotres les gatos sabemos que estamos vivos porque vivimos y disfrutamos ese paso constante por el planeta,  esa paz que nos da es la que nos dejó como consejo Lu Han, vivir conscientemente, con amor y respeto con nuestro entorno.

Este es mi aporte a la historia de “las siete vidas de los gatos”,